Rara vez nos encontramos con una película que relata el día a día de la gran civilización Maya. El multitalentoso actor, director, escritor y productor Mel Gibson nos transporta a otro mundo con su nueva película: Apocalypto, que literalmente significa nuevo comienzo, un toque irónico del director, ya que la trama de la película se perfila en el descenso de la Cultura Maya y justo antes de la llegada de los Españoles a tierras Americanas. ‘Garra de Jaguar’ (Rudy Youngblood) nos conduce por esta experiencia llena de aventuras de vida o muerte; todo con el propósito de preservar y continuar la tradición de su tribu. La maravillosa cinematografía, el diseño de vestuario y las actuaciones elaboradas juegan un importante papel en pintarnos una imagen casi exacta de esta gran civilización.
Contándonos esta historia, Gibson nos adentra en una civilización que no gozaba de comodidades, ni avances tecnológicos. Su vida era centrada en la supervivencia: su día, a día consistía de cazar que comer para ellos y sus crías; rodeados por un bosque salvaje lleno de criaturas mortales con las cuales han aprendido a convivir. Los Mayas fueron establecidos en las áreas que se conocen hoy en día como el sur de México, Guatemala y otros países Centroamericanos. Cada tribu tenia sus características especiales, dependiendo el lugar donde se hayan establecido, desarrollaban las aptitudes que fuesen necesarias, dadas las condiciones naturales de el lugar donde se encontraran.
A su vez existían tribus dentro de estas grandes civilizaciones, que se consideraban superiores o más cercanas a los Dioses; estas practicaban sacrificios humanos para “satisfacer” la sed de sus Dioses. En la película podemos ver como estas tribus azotaban contra otras que eran más pequeñas y pacificas y los utilizaban para sus demostraciones públicas de sacrificios humanos. Hacían estos sacrificios delante de multitudes, como instrumento de intimidación y ejemplo de su superioridad como tribu. En consecuencia esto se convertía en una herramienta política, ya que estimulaban y manipulaban a sus seguidores con estas demostraciones. Aun en civilizaciones que llegaron a su máximo potencial hace más de 500 años, con costumbres primitivas, podemos ver la organización social y política con elementos muy similares a los de hoy en día. Inmediatamente podemos identificar los conceptos paralelos a nuestra época contemporánea: ya que vivimos en un mundo donde el más fuerte prevalece y un gobierno que envía a sus tropas a Irak como sacrificio humano. Gibson presenta este concepto visual en su estilo en instancias demasiado crudo y realista ya característico del Director, después de su éxito mundial “La Pasión de Cristo”, sabemos que es simplemente un nivel grafico no apto para cardiacos; la película definitivamente no es apta para niños, y adultos con estómagos delicados o intolerantes a ver la sangre en pantalla.
Para mantener la autenticidad Gibson presenta la película en el idioma original ‘Yucatec Maya’ y además utiliza un elenco de actores con raíces indígenas. Por ejemplo el actor principal Rudy Youngblood, es Indio Nativo de las tribus Comanche en Texas.
Es refrescante ver una película que trata sobre esta gran civilización que establecieron enormes ciudades, edificaron grandes pirámides, eran diestros en las áreas de la caza y también llegaron a ser tan avanzados en la astronomía que podían descifrar los movimientos de las estrellas con gran exactitud; existen teorías que dicen que su calendario es aun mas preciso que el que utilizamos hoy en día. Desafortunadamente Mel Gibson y co-escritor Farhad Safinia se enfocan solamente en la naturaleza salvaje y el instinto carnal desarrollado de estas personas. Hay momentos en la película tan sangrientos que nos hace pensar que lo hacen por el simple hecho de impactar al publico. Aun así no podemos desacreditar la gran labor del director, específicamente en las conmovedoras actuaciones de este elenco de actores desconocidos. Además es un buen comienzo que podría estimular a las personas a investigar más sobre esta gran civilización.
Para mantener la autenticidad Gibson presenta la película en el idioma original ‘Yucatec Maya’ y además utiliza un elenco de actores con raíces indígenas. Por ejemplo el actor principal Rudy Youngblood, es Indio Nativo de las tribus Comanche en Texas.
Es refrescante ver una película que trata sobre esta gran civilización que establecieron enormes ciudades, edificaron grandes pirámides, eran diestros en las áreas de la caza y también llegaron a ser tan avanzados en la astronomía que podían descifrar los movimientos de las estrellas con gran exactitud; existen teorías que dicen que su calendario es aun mas preciso que el que utilizamos hoy en día. Desafortunadamente Mel Gibson y co-escritor Farhad Safinia se enfocan solamente en la naturaleza salvaje y el instinto carnal desarrollado de estas personas. Hay momentos en la película tan sangrientos que nos hace pensar que lo hacen por el simple hecho de impactar al publico. Aun así no podemos desacreditar la gran labor del director, específicamente en las conmovedoras actuaciones de este elenco de actores desconocidos. Además es un buen comienzo que podría estimular a las personas a investigar más sobre esta gran civilización.
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